Hero Image

Noticias

Experiencias docentes, Luis Rojas: «Me encanta fomentar en los alumnos la libertad de pensamiento»

Luis Rojas

El diseño conlleva utilizar las manos como herramientas de creación, algo que queda en evidencia al conocer las materias que imparte este profesor, para confirmar la relevancia de la labor manual al momento de sentar las bases de esta disciplina. “Partí en la UDD en 2016 y dictando la asignatura de Tipografía y Diagramación, ramos que en esa época se daban juntos y que después empezaron a impartirse separadamente y en dos semestres y, aunque nunca había realizado clases, tenía muchas ganas de fomentar el trabajo análogo en los alumnos, pues sentía que se había abusado del recurso digital y olvidado del proceso en sí”, fundamenta. 

Es que tal y como señala este docente para hacer diseño hay que mancharse las manos. Y como ejemplo detalla el aprendizaje obtenido por los alumnos de segundo año en su curso de Tipografía: “Aquí lo esencial es que puedan dejar de lado la utilización exclusiva de las fuentes digitales a la hora de diseñar logotipos o títulos, y que comprendan lo que pueden conseguir usando tipografías propias y lettering como recurso gráfico, siendo capaces de crear sus propias letras y obtener resultados únicos y auténticos”, enfatiza. 

LAS MANOS COMO INSTRUMENTO  

Un volver al origen de esta disciplina que también promueve en las otras tres asignaturas que imparte: Diagramación, Materiales y Producción Gráfica. “Estos dos ramos están ligados al proceso productivo y hacen más tangible al diseño gráfico, pues enseñan a los chicos de segundo y tercer año, respectivamente, los sistemas de impresión, grabado, maqueteado, etc.”, resume y agrega que “me encanta esto de darle continuidad a la educación, porque yo parto con un curso y estoy tres semestres instruyéndolos en estas materias análogas, lo que afiata los lazos y la cercanía”, asegura Luis.    

Prueba de lo anterior es el reconocimiento logrado durante 2022 como Mejor Profesor del año de la Facultad de Diseño, sede de Concepción. “A los estudiantes les parece bien mi manera de trabajar y que les dé mayor libertad para pensar y crear (…). La experiencia me dice que practicando y haciendo se asimila mejor y que el valor del diseño reside en lo auténtico y en la conceptualización que cada uno aporte a la solicitud técnica que otorga el profesor”, señala.   

En la asignatura de Materiales los diseñadores en formación aprenden a generar piezas únicas a partir de adhesivos, papeles, cartones, madera o vidrio, entre otros, armando una base de datos propia que puede ser usada en futuros proyectos, o subida a la nube para que las próximas generaciones aprovechen estos recursos. 

Materializando el diseño  

Y para confirmar la incidencia del trabajo manual, Luis Rojas relata una experiencia docente que lo llenó de orgullo: “Tuve muy buenos resultados en la asignatura de Producción Gráfica, que iniciamos el último semestre de 2022 y terminamos este 2023, donde los alumnos de tercer año pudieron implementar sistemas análogos o de grabados que les permitieran materializar el diseño, entre los que estaban las técnicas de stencil, encuadernación y xilografía”, recalca. “Son materias que no habían visto, pero donde conocieron un oficio que no olvidarán jamás, pues es como andar en bicicleta, y les servirá para el resto de su vida profesional”, agrega. 

Entre los principales desafíos a sortear, Luis señala que los futuros diseñadores debieron familiarizarse con prácticas como cortar, pegar y calzar y conseguir productos presentables y casi perfectos, pero hechos a mano y al detalle.  

“El gran aprendizaje de esta iniciativa fue constatar que los chicos pueden llegar lejos si se lo proponen y se dan el tiempo; que son capaces de trabajar de manera manual e independiente de los recursos digitales con que cuenten”, resalta y complementa, “siempre hay que tener claro que la esencia de esta disciplina está en el proceso más que en las herramientas”.   

“Sugiero a mis alumnos generar contenidos y cosas que sean interesantes, que la gente vea y valore su trabajo y jamás dejar en el olvido la responsabilidad y humildad al momento de ejercer como diseñadores”. 

PROPUESTA DE ORIGINALIDAD 

Tal como sostiene este docente, los estudiantes deben tener una percepción de lo auténtico y para eso la estrategia de instrucción abordada en este tipo de asignaturas es fundamental. “Los alumnos deben comprender que siendo originales les irá mucho mejor, podrán destacar y vivir del diseño (…). Tienen que saber que esta disciplina primero es funcional y luego estética y que deben combinar en su justo equilibrio el ámbito digital y análogo”, precisa Luis. “Siento que mi gran plus es ser una mezcla de lo que aprendí cuando estaba en la universidad en 2005 y todo lo que he adquirido en mis años de experiencia”, añade. 

Por lo mismo aconseja no renunciar a las bases del diseño, pero sí ayudarse en su implementación con la utilización de distintas estrategias. “Como diseñadores tenemos que usar la tecnología como una herramienta a nuestro favor y que consagre a esta disciplina, haciendo nuestro quehacer más efectivo y rápido, pero sin dejar atrás su calidad”. 

Entre las habilidades que desea traspasar a su alumnado están bajar los niveles de ansiedad, manejar bien los tiempos y canalizar la creatividad: “Nunca es tarde para seguir aprendiendo y valorar lo análogo. Yo, por ejemplo, ahora parto a un Máster en Diseño Gráfico a EINA de la Universidad Autónoma de Barcelona, porque quiero salir de la caja un rato, ya que soy bien tradicionalista, y conocer cosas nuevas para transmitírselas a mis alumnos y que se enamoren más del proceso”, cuenta.  

TRANSMISIÓN DE CONOCIMIENTOS 

La pasión por esta disciplina surgió primitivamente y se fue expandiendo durante su educación superior. “Yo siempre fui bueno para el dibujo, entonces era como una especie de consecuencia optar por algo relacionado con el área artística. En cuanto a la docencia, siempre se me hizo fácil expresar y explicar lo que pensaba y cuando trabajé en publicidad, me tocó dirigir equipos y percibí que me agradaba traspasar los conocimientos e instruir”, recuerda.  

Al momento de enunciar su principal aporte como diseñador y profesor, recalca: “creo que soy uno de los pocos que trabaja en lettering y contribuyo con mi visión más práctica de hacer las cosas. Además, soy alegre, motivador, comprensivo y eso me acerca a los estudiantes”. 

Su forma de ser y enfrentar el ámbito profesional le ha traído excelentes y diversas oportunidades. “Cuando trabajé en agencia de publicidad me tocó realizar el rediseño de la Fuente Alemana de Concepción, un lugar icónico y donde descubrí lo que era colaborar en proyectos más grandes. También marcó mi carrera la cofundación de mi estudio Binomio y Kondimento, con el que participé en REC o Rock in Conce el que caló harto en el público y, por último, entre otras experiencias, mi labor como ilustrador en las publicaciones infantiles del proyecto Rescatando Sueños de la ciudad de Coronel”.  

Si de tendencias se trata, Luis resalta la incidencia de las redes sociales al momento de visualizar la disciplina. “Siento que este tipo de plataformas permite conocer el trabajo de muchas personas, salir de la burbuja geográfica, democratizar el diseño y compartir los contenidos”.  Sugiere a sus estudiantes aprovechar la visión global que brinda esta carrera, y la capacidad que otorga para mirar el mundo desde otra perspectiva y de una manera más analítica. “Espero que a través de mis clases los alumnos aprendan a ejercer su profesión con responsabilidad, siendo cuidadosos en los detalles, trabajando en equipo y valorando las técnicas análogas”. 

Sus principales referentes 

A la hora de hablar de sus fuentes de inspiración, Luis Rojas no duda: “Obviamente destaco la labor de la escuela de la Bauhaus y también me gusta mucho lo que hace Paul Rand. Pentagram Design, es otro colectivo de diseño que me encanta, especialmente, Paula Scher.  Además, me llaman mucho la atención los sistemas de comunicación como el underground de Londres o lo que ha hecho Diseño Shakespear de Argentina.  Como imperdibles para revisar y analizar, sugiero la revista chilena Joia, el documental “Abstract, the art of design” de Netflix, los letreros de Nicolo Montoni o el lettering de Carga Máxima.